Aprender fotografía de una forma divertida; «El simulador»
Aquí estoy de nuevo acudiendo a mi cita semanal contigo para aprender fotografía de una forma divertida. Hoy quiero ampliar el artículo anterior con la intención de que estos dos post sean «un todo» en tu inicio o profundización de la técnica fotográfica. En «La receta del fotógrafo para hacer fotografías espectaculares» te hablé de la exposición y los valores que la sustentan, al igual, que de aquellas ventajas e inconvenientes que tenían variarlos al alza o a la baja; donde incluso podías descargarte la infografía/resumen. Pero ahí no queda todo…
Para hacer una buena fotografía no es imprescindible tener una cámara reflex. Una buena fotografía se puede realizar con una cámara compacta, tipo evil o llegado el momento, con un móvil. Lo que pasa es que cuanto más control te ofrezca sobre la captura más se acercará a la foto que tú quieres hacer y no la que tu cámara hace por ti en un modo automático.
La gran diferencia entre los tipos de cámara que te he nombrado es su sensor, que no los megapíxeles, y aquí sí que el tamaño importa. A mayor tamaño de sensor mejor calidad de fotografía y como podrás deducir, no puede llevar un sensor de similar tamaño un móvil que una reflex aps-c o una reflex full frame, de formato completo (35mm)
Por otro lado la fotografía también puede ser el arte de sacar el máximo rendimiento al equipo que tienes, sea cual sea. A continuación te cuento cómo…
Las cámaras compactas, por ejemplo, ya suelen venir con multitud de posibilidades que las acercan más a las réflex. Muchos de esos modelos te dan la posibilidad de utilizar el programa Manual o algún otro semiautomático que te hagan olvidarte del uso de modos automáticos donde es la máquina la que decide por tí y a la que al final habría que otorgarle el mérito de tu fotografía, o al menos el mérito técnico.
Hoy te quiero mostrar los distintos modos de disparo que traen habitualmente las cámaras reflex y que te pueden ayudar a hacer una mejor captura y exposición de tu imagen. Y te animo a que si no tienes este tipo de cámara cojas tu compacta o tu móvil y busques estos mismos modos, pues te puedes sorprender al ver que están y que los puedes trabajar de la misma forma, aunque hasta ahora no supieras de su existencia.
El secreto está en tener el control sobre la fotografía que quieres captar. Por lo tanto te diré que tu reflex (o compacta) suele venir con un dial lleno de modos de disparo. La gran mayoría seran automáticos/predefinidos según qué es lo que quieres fotografiar. Yo me quiero centrar en presentarte aquellos en los que tú decides.
(M) Modo Manual.
Este es el modo en el que tú decides todo. Eliges la ISO, la apertura y la velocidad a tu conveniencia. Tranquilo, los fabricantes te quieren echar una mano para dar el salto al Manual y no te dejan solo. El modo manual muestra el exposímetro de la cámara. Un indicador que te ayudará a saber si los valores que has elegido te darán una buena exposición o por el contrario será una subexposición o sobreexposición. Te mostrará una marca que te ayudará a corregirla modificando alguno de los valores para que quede justo en el centro (0). Ahí es donde el exposímetro te indica que tienes una correcta exposición.
(Av), (A) Modo de prioridad a la apertura.
Este modo es semiautomático y te da la oportunidad de decidir qué apertura quieres utilizar, según tu necesidad (f/__) y la cámara te ayudará a exponer de forma adecuada eligiendo por tí qué ISO (siempre que esté en ISO automática, sino también podrás decidir este valor) y qué velocidad necesitas para el disparo.
(Tv), (S) Modo de prioridad a la velocidad.
Este modo, también semiautomático, te ofrece elegir el valor de velocidad que necesites, y de la misma forma que en el anterior, la cámara decidirá el resto de valores. La ISO, siempre que esté en automático y no hayas elegido un valor distinto y la apertura que ella piensa necesitas para una correcta exposición.
Como conclusión te diré que te pongas en marcha y te pases ya al modo manual de tu cámara, siempre que los sujetos a fotografiar te permitan un tiempo para decidir cada valor de tu exposición. Si por el contrario son móviles o cambiantes ayúdate de los modos semiautomáticos de prioridad a la apertura o de prioridad a la velocidad de obturación. En ambos casos tendrás un plus de rapidez para no perderte el momento, ya que la cámara decide muy rápidamente por tí el resto de valores a utilizar para que tu fotografía quede bien expuesta.
¡Llegó la hora de practicar!
Como no es lo mismo leer sobre fotografía que aprender fotografía (a andar se aprende andando) y me hago cargo de que puedes no tener una cámara que permita estos controles o simplemente estás muy a gusto en tu casa, te voy a dejar un simulador de fotografía que te va a permitir practicar de una forma divertida todo lo hablado en este artículo y en el anterior sobre la exposición y las variaciones técnicas y artísticas que te ofrece tu cámara al utilizar las variables de la exposición de una forma u otra. (Utiliza Abobe Flash Player).
Para ello sigue las instrucciones que te dejo más abajo.
Espero que te guste tanto como a mi, que practiques y que me lo cuentes en los comentarios. De la misma forma que si te ha gustado el contenido te suscribas al Blog.
Colócate delante de esta guapa niña y su molinillo de viento, que ya te digo yo, que no es mi sobrina. Decide con los deslizadores de la izquierda la iluminación de la escena (que quita o aumenta la luz aunque no lo aprecies en la imagen que ves), ajusta la distancia a la que te pondrás de 1 a 3 metros y qué distancia focal quieres utilizar, de la misma forma que si tuvieras en tus manos un objetivo 18-55mm.
Después decide qué quieres hacer y elige Prioridad a la Apertura o Prioridad a la Velocidad de obturación, pues ya deberías saber qué optienes utilizando una u otra. O lánzate directamente al Modo manual y ayúdate del exposímetro que tienes justo bajo la niña, variando los controles que creas necesarios para dejar el indicador en el centro, que es donde la exposición sería correcta. Puedes elegir también si estás utilizando trípode o no.
Una vez hayas ajustado todos los parámetros dispara con el botón de la parte inferior derecha y obtendrás la foto que acabas de hacer con los parámetros empleados. Si la fotografía quedó bien expuesta obtendrás en la parte inferior de tu foto una carita sonriente o triste si no ha sido así. Después podrás regresar al visor para volver a fotografiar. Si quisieras guadar la foto que has hecho tendría que ser por medio de una captura de pantalla; es el único fallo.
No conocía esa aplicación, me parece chulísima y muy didáctica. Gracias por colgarla.
Y a seguir con el blog que, para mí, lo llevas por muuuy buen camino.
Un saludo!
Muchas gracias por tu comentario y participación activa en el Blog, Antonio. Creo que es una herramienta muy práctica. En cuanto la descubrí estaba deseando compartirla con vosotros. La verdad es que tiene muchas posibilidades para aquellos que empiezan en esto de la fotografía o simplemente quieren practicar o jugar con sus posibilidades. Un saludo